Nicho en deconstrucción

El fin de semana pasado hubo cambios abruptos en mi mapa alcoholico-politico. Despues de casi tres años ininterrumpidos de reinado en mi higado, el popular tequila con coca-cola ha sucumbido ante un nuevo soberano, oriundo de la clase media. Se podría decir que el brebaje "nacional y popular" no me satisfizó lo suficiente esa noche y decidí optar por la renovación total, por una verdadera bebida ciudadana que reconcilie la inexorabilidad del alcohol y la empalagosidad de un caramelo con sabor a fruta. Posteriormente dicho trago fue legitimizado en forma aplastante por mis camaradas de salida nocturna.

Señores, pongan la alfombra roja y abran paso al:

DAIQUIRI DE NARANJA

En esta mañana de lunes que da rienda suelta a una nueva tentativa de instaurar la monotonia, combatiendo al orden diario me dispongo a husmear en ciertos cds frutos de mis primeras bajadas de música en la red y me encuentro con un discaso de Mercury Rev que compartia lugar en su contenido con una cosa horrible de Supergrass. Bueno, lo cierto es que el album en cuestion se llama "See you on the other side". Hacia rato que no lo escuchaba por razones de vertigo y feroz competencia.

Relieves cromaticos

Los Mercury tienen la facultad impresionante de pintar el alrededor de donde uno transita con colores claros y armonicos, transformando cualquier paisaje en un microuniverso de verdaderas tres dimensiones (psiquicamente hablando claro esta). No se si habrá sido el tiempo que tenia sin escuchar este discazo pero hacia rato que no pasaba el primer día habil de una manera tan poco ortodoxa (esto es, alivianada :))

Esta mujer cada vez gusta mas a medida que saca disco nuevo. Siguiendo con la tonica Electroclash de su anterior trabajo (Black cherry), Alison Goldfrapp nos regala 11 canciones que encierran desde las noches mas agitadas de baile con bases fuertes y teclados supermelodicos hasta momentos de nostalgia que hacen emerger al Marc Bolan mas sentimental. Aunque desde una mirada mas global la estructura musical del album sea casi la misma de su obra anterior y a veces dan ganas de que la irlandesa cante para nosotros algun temita como los de su primer disco (Felt mountain), este CD no tiene desecho alguno, es mas, rinde para unas cuantas escuchas en tu minicomponente, sobretodo promediando el tema 3 del disco;"Ride a white horse", un hitazo por donde se lo escuche.

Por motivos de escape, descanso y conocimiento etnografico me fui por cinco días con mi novia a la ciudad que la vio crecer (?): Tehuacán. Supongamos que soy una tia cincuentona llena de fotos de su ultimo viaje.

Autobus: El Co-equiper del chofer pone un DVD. La pelicula: Una sobre bomberos neoyorkinos post 11-s, no me acuerdo el nombre. Divago un rato con Zaida (La compañera tiene nombre, vió ;) quien al rato se duerme. Me pongo los auriculares y a mirar el atardecer escuchando Tortoise.


Tehuacán nos da la bienvenida con una pintura muralista que tiene exaltaciones geograficas y antropologicas (mas connotaciones provinciales y populares) ubicada en el techo de la entrada a la sede de la presidencia municipal.


Interludio con el Sol.


Julio no murió, posee una tienda de abarrotes en Tehuacán.


El mercado popular en la vispera del día de muertos.


Prensa catartica.


Este es un reducto de agua "de manantial" (lo que es, agua mineral). Lo que mas me impactó fue la arquitectura del sitio, predominantemente "Kubrickesca".


Gente bailando danzón, me quedé con las ganas. Maldita timidez.


Jesus esta observandonos.


El transporte público es genial, son casi todas combis las cuales ,a pesar de su reducido tamaño, son mas comodas que las carcachas que circulan por Veracruz.